Luego de semanas de especulación, y supuestas negociaciones, el mediocampista mexicano, Marcel Ruiz, el futbolista y el Toluca habrían rechazado una oferta para ir al Ipswich Town de la segunda división de Inglaterra. Oportunidades que, a mi parecer, no aparecen dos ocasiones en la vida.
La cifra que puso el club inglés sobre la mesa fue de 10 millones de dólares, una cantidad nada despreciable. Pero se rechazó por dos factores, primero porque al Toluca le pareció poco el monto propuesto, y a Ruiz también le pareció corto el desafío.
Pero creo que cometen un grave error, principalmente Marcel Ruiz. Está desaprovechando una gran oportunidad en la que es la segunda división más importante de todo el mundo, un trampolín perfecto para llegar a la órbita de los equipos más importantes de Europa.
Así comenzaron algunos, como Miguel Layún, en la segunda división italiana y en la cúspide de su carrera cedió a la segunda división de Inglaterra. Y el último caso extraordinario donde un club gigante se fijó en un joven mexicano fue el Manchester United en Javier “Chicharito” Hernández hace ya algunos, muchísimos, años.
Eso no pasa ahora, no vendrá el Real Madrid a ofrecerle 40 millones a un equipo de nuestra liga por un jugador que ya pasa de los 24, hay que aterrizar los pies sobre la tierra. Marcel Ruiz debe priorizar el éxito en su carrera y el Toluca, bueno, entiendo que los clubes no ven más allá del negocio.
Aun así, por supuesto, respeto totalmente la decisión de Marcel.
¿Por qué se quedan en México?
No sólo es el caso de Marcel, lo vimos en su tiempo co Rodolfo Pizarro, con Charly Rodríguez, entre otros jugadores que prefirieron quedarse en la comodidad de “un grande” en México que sobreexigirse en otro país.
El problema radica en la comodidad. Comodidad en un club que, si no te vas, te ofrece un salario exorbitante similar o incluso mayor al que te ofrecerán en un equipo de segunda línea de Europa. Por eso también están llegando muchos europeos a México: mismo dinero, menor exigencia.
En lo futbolístico te alcanza con rendir cuatro meses que dura el torneo, ganar o no, irte de vacaciones más de un mes, y participar en puros torneos a la par de Estados Unidos. Además, tu llamado a la Selección Mexicana se convierte en algo seguro, claro, si sigues apareciendo en comerciales y eres del agrado de la gente.
En Europa sudan sangre si quieren mantenerse en un equipo titular de segunda división, pero si logran adaptarse, llegarán lejos como Edson Álvarez, Carlos Vela o Irving Lozano.
Finalmente, la afición también pone de su parte. Marcel Ruiz es actualmente “la joya” de México, es campeón con el Toluca, y por todo esto, “endiosan” facilmente al jugador. No digo que Marcel no sea un gran jugador y que este protagonismo no se lo merece, al contrario, pero esta clase de aceptación por parte del mexicano también pone en una cuna de edredón a los futbolistas.
Aparte, en Europa el tener 24 años es una edad para estar consolidado, no una “joven promesa”.
Lo que se pierden en Europa
Lo dejé claro y no me cansaré de aclararlo, la Championship es la mejor segunda división del mundo, es una oportunidad muy buena.
Me toca ver algunos comentarios asegurando que es mejor un equipo “top” en México, que un equipo de segunda en Inglaterra. Están más que desubicados, Inglaterra es la cuna del fútbol y estamos a muchísimos años y trabajo de empatar su nivel y exigencia.
Además de que es una catapulta para los equipos grandes en Europa, parece crucial una formación en los países con mejor fútbol de cara al Mundial 2026, donde todo el mundo pone el foco en tu rendimiento.
En contraste del Toluca y Marcel Ruiz, vemos la llegada de Patrick Agyemang al Derby County (un club del mismo nivel que Ipswich Town). El delantero estadounidense y el club Charlotte FC para nada le hicieron el feo a este equipo y sus 10 millones de dólares, sí, exactamente la misma cantidad que pedían por Marcel.
Así el pensamiento… ¿conformista?… del futbolista mexicano.