Tras tres años de tensión política entre el gobernador de Nuevo León y el PRIAN, la presidenta Claudia Sheinbaum intervino con un ultimátum: si no se llegaba a un acuerdo, Monterrey podría quedar fuera como sede del Mundial de Fútbol 2026. A menos de un mes de haber firmado un pacto de no agresión para destrabar el presupuesto, Movimiento Ciudadano ha abierto un nuevo frente de disputa: el control de la Unión Ganadera Regional.
Este sector, clave en la economía del estado, produce alrededor de 300 mil cabezas de becerro al año, generando millones de dólares en exportaciones y manteniendo una fuerte influencia política en Nuevo León. Hoy, los 45 delegados de la Unión Ganadera votarán para elegir a la plantilla que definirá el futuro del sector pecuario en la región, en un proceso que se prevé tenso, con movilizaciones y posibles enfrentamientos entre grupos de choque.
Las votaciones
Adrián de la Garza Tijerina, actual dirigente de la Unión Ganadera y descendiente del exgobernador Arturo B. de la Garza, busca su reelección con el respaldo del 75% de los delegados. De la Garza mantiene estrechos lazos con el sector agropecuario y la clase política del estado. Sin embargo, el gobernador Samuel García ha manifestado un inusual interés en removerlo, promoviendo a Armando Víctor Gutiérrez, diputado local de Movimiento Ciudadano y exsubsecretario de Desarrollo Agrícola de Nuevo León.
Durante la gestión de Gutiérrez, Nuevo León perdió el permiso del Departamento de Agricultura de Estados Unidos para exportar ganado, lo que ha causado pérdidas estimadas en 400 millones de pesos anuales. La Secretaría de Desarrollo Agrícola dejó sin solventar más de 40 observaciones requeridas por inspectores estadounidenses, lo que ha impedido la exportación de ganado desde noviembre de 2023. Además, en 2024, el gobierno estatal no publicó el presupuesto para dicha Secretaría, aumentando la incertidumbre en el sector.
Intereses del gobernador
Ganaderos temen que la Unión Ganadera se convierta en un instrumento político del gobierno estatal y sospechan que el verdadero interés está en los terrenos de la Expo Ganadera en Guadalupe. Esta propiedad, de miles de metros cuadrados, se encuentra junto al estadio de los Rayados de Monterrey, una de las sedes del Mundial de la FIFA 2026, lo que la convierte en un activo estratégico y altamente codiciado.
Con un escenario de alta tensión y posibles repercusiones políticas y económicas, el desenlace de esta disputa podría redefinir el equilibrio de poder en Nuevo León, afectando tanto al sector agropecuario como a la gobernabilidad del estado.