El Gobernador de Nuevo León, Samuel García Sepúlveda, no acudió a la sesión solemne del Congreso del Estado para presentar su tercer informe de gobierno, lo que generó críticas por parte de legisladores de oposición, quienes exigieron su renuncia debido a las diversas crisis que enfrenta la entidad. Diputados del PAN, PRI, Morena, Partido Verde y Partido del Trabajo presentaron un “contra informe“, detallando los problemas de gobernabilidad, seguridad, movilidad, salud y recursos públicos.
Lorena de la Garza Venecia, presidenta del Congreso, instó al Gobernador a evaluar su “salida política“, subrayando la gravedad de las crisis. En sus intervenciones, legisladores como Javier Caballero (PRI) y Anylú Bendición Hernández (Morena) señalaron la falta de resultados y de voluntad política para resolver los problemas del estado, atribuyéndolos a las ambiciones presidenciales de García y a las tensiones políticas que han paralizado la gestión estatal.
El coordinador del Partido del Trabajo, Guadalupe Rodríguez, y el diputado José Luis Santos Martínez (PAN) también criticaron la gestión del Gobernador, enfatizando la necesidad de superar las confrontaciones y atender las demandas ciudadanas, especialmente en temas como la seguridad, el agua y la movilidad.
Los legisladores coincidieron en que el gobierno de García ha fomentado la división y la polarización, lo que ha afectado el desarrollo y bienestar de Nuevo León.