La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, anunció este lunes que el gobierno mexicano podría ampliar las demandas presentadas contra los fabricantes y comerciantes de armas de Estados Unidos, en caso de que el Gobierno de EE.UU. decida declarar a ciertos grupos delictivos como grupos terroristas. Este cambio en la designación de grupos delictivos aún debe pasar por el Senado estadounidense.
En su conferencia matutina, conocida como “Las mañaneras del pueblo“, Sheinbaum subrayó que la posible medida podría implicar la ampliación de la demanda internacional que México ya tiene contra los productores de armas en Estados Unidos. “México tiene una demanda internacional contra fabricantes de armas y distribuidores de armas en Estados Unidos. Si llegan a decretar a los grupos de la delincuencia organizada como terroristas, tendríamos que ampliar la demanda“, explicó.
La mandataria citó datos del Departamento de Justicia de Estados Unidos, que reconoció que el 74% de las armas utilizadas por los grupos delictivos en México provienen de EE.UU. Ante este panorama, Sheinbaum cuestionó: “¿cómo quedan las armadoras y las distribuidoras frente al decreto? Tal vez los abogados lo están viendo, pero pueden ser cómplices“.
Este anuncio refuerza el reclamo del gobierno mexicano sobre la responsabilidad de los fabricantes de armas en el tráfico ilícito de armas hacia México, un fenómeno que contribuye a la violencia generada por el crimen organizado en el país.
La presidenta concluyó señalando que, en caso de que las organizaciones delictivas sean catalogadas como terroristas, las responsabilidades de los distribuidores de armas serán evaluadas de manera más profunda, tanto en el ámbito legal como ético.