Como sucede en países de primer mundo, la fórmula por el senado compuesta por Judith Díaz y Waldo Fernández propondrá que se autoricen seis meses de permiso por maternidad con el fin de crear el vínculo madre-hijo, además de desarrollar correctamente.
En rueda de prensa, acompañada del dirigente estatal del partido, Asael Sepúlveda, Díaz aseguró que se busca modificar el Artículo 123 Constitucional.
“Extender esta licencia a seis meses traería consigo una serie de beneficios, tanto para quienes maternan, los bebés y la sociedad en su conjunto. Las mujeres que se sienten respaldadas en su rol de madres tienen más probabilidades de reincorporarse al trabajo con menos estrés, una mentalidad positiva y un mayor compromiso. Esto nos ayudará a retener el talento, reducir el ausentismo laboral y aumentar la productividad de las mujeres trabajadoras”, explicó Judith Díaz.
Por su parte, Asael Sepúlveda señaló que la propuesta se da ya que se tiene un registro de que 26 de cada 100 hogares son sostenidos por la mujer, por lo que en caso de dar a luz se ve obligada a regresar a sus labores a los tres meses.
“Son tiempos de mujeres y vale la pena recordar que en Nuevo León, de cada 100 hogares, 26 son mantenidos por una mujer que tiene doble trabajo: ganarse el sustento diario y, al regresar a la casa, cuidar de sus seres queridos. Además de esta iniciativa, estamos promoviendo la ley de lactancia materna para que la mamá esté cerca del bebé. De acuerdo a estudios de neurólogos, la alimentación del pecho materno por los primeros seis meses de vida es clave para su desarrollo”.
En este sentido, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda la lactancia materna exclusiva durante los primeros seis meses de vida, ya que proporciona los nutrientes esenciales y fortalece el sistema inmunológico del bebé, reduciendo así el riesgo de enfermedades y promoviendo un crecimiento saludable.
“Madres sanas, infancias sanas: sociedad mejor”, concluyó la aspirante al Senado Judith Díaz. De esta manera y a largo plazo, esta política de primera infancia, además de promover el bienestar de las mujeres trabajadoras, fomenta el desarrollo económico y social del país.