Antes de cumplir dos años en el cargo Gerardo Palacios Pámanes decidió poner su renuncia en el escritorio del gobernador Samuel García y hacerse a un lado en medio de una importante crisis de seguridad.
El hasta hoy secretario de Seguridad Pública de Nuevo León llegó al cargo el 16 de julio del 2022 en sustitución de Aldo Fasci Zuazua, quien salió del puesto argumentando motivos de salud.
En 2022 se cerró el año con 1430 homicidios, al año más “sangriento” de la década y solo debajo del récord histórico registrado en 2011 con 1683 muertes dolosas.
La cifra compartida entre los mandatos de Fasci Zuazua y Palacios Pámanes bajó en el 2022, pero solo en 17 casos, pues lo homicidios sumaron 1417.
Los números arrojados en la primera mitad del año, pues se contabiliza hasta el mes de junio del 2024, arrojan un promedio alarmante, pues se tienen 803 homicidios, lo que según las matemáticas al final de año la cifra superaría los 1600.
Encaminados al récord histórico del 2011, Palacios Pámanes decidió renunciar al cargo y ahora este puesto será ocupado por el actual Comisario de Fuerza Civil Gerardo Escamilla, que hasta el 2022 fungía como secretario de Seguridad Pública de San Pedro.
Las inversiones de Palacios Pámanes
El su puesto como titular de la seguridad en Nuevo León, Palacios Pámanes tuvo la “chequera abierta” y estos son algunas de las compras que hizo para reforzar la seguridad.
- Black Hawk: un helicóptero diseñado por Estados Unidos para efectos bélicos, su adquisición fue cuestionada por diversos factores de operatividad, además del precio, más de 76 millones de pesos.
- Black Mamba: Unidades blindadas, de reacción y confrontamiento.
- Cuarteles de Fuerza Civil en diferentes municipios del estado en donde la delincuencia es más alta, patrullas para Fuerza Civil, así como equipamiento.