El Pozo del Gavilán, una maravilla natural en riesgo, que se encuentra ubicada en el municipio de Galeana, es una belleza que debe ser protegida.

Así lo advierte el doctor Alonso Ramírez Fernández, geólogo investigador de la Facultad de Ciencias de la Tierra de la UANL.

Ramírez Fernández explica que las paredes de este cenote están conformadas por una tierra que es rica en yeso, pero que la hace muy frágil y susceptible a sufrir fracturas y grietas.

Esto pone en peligro a las personas que acuden del estado, del país y el extranjero que hacen rapel para descender y disfrutar de sus aguas.

Con las cuerdas van “serruchando” sus paredes y podrían provocar una caída que ponga en peligro su integridad física.

“En esa región de Galeana, muy cerca de la cabecera municipal, aflora una roca natural conformada por cristales de yeso que son sulfatos de calcio, rocas formadas en un ambiente de influjo de agua marina, pero con una tasa de evaporación muy alta. Esta formación data de hace 150 millones de años.

Donde está formado el cenote no es la roca viva, es como un relleno de un valle del mismo material, imagínate que hay un valle que se rellena de material que se degrada de regiones más altas, es un relleno más o menos compactado, pero de la misma naturaleza del yeso, e insisto es un material muy suave”, explicó el geólogo.

 

El Pozo del Gavilán, una maravilla natural en riesgo

El fracturamiento natural del cenote, aunado al roce de las cuerdas por sus paredes, hacen riesgosa la práctica del rapel.

Pero esta práctica es necesaria para poder bajar a las aguas cristalinas de esta maravilla geológica.

“El asunto no es prohibir la visita al sitio, sino desarrollar infraestructura para que la gente baje y no afecte la estabilidad de las paredes.

El ingenio puede ayudar a que las cuerdas simple y sencillamente no estén en contacto con la pared del cenote y protegerlo”, insistió el experto.

Ramírez Fernández advierte de la necesidad de un análisis detallado y una propuesta para garantizar la seguridad de los visitantes y evitar accidentes.

“En cualquier parte del mundo esto sería parte del geopatrimonio local regional. El Pozo del Gavilán es un lugar de clase mundial, es muy bonito, pero en México apenas se está desarrollando, la observación y apreciación de los paisajes más allá de llegar con la carne asada y la hielera.

El geoturismo es hacer una integración con el medio ambiente, más allá de lo que uno puede hacer en el patio de su casa”, concluyó el investigador.

Aunque el Pozo del Gavilán es muy concurrido, se desconoce si hay control de las autoridades de Galeana sobre las actividades que se realizan.

El Pozo del Gavilán, un #cenote… ¡en Nuevo León!
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— México Travel Channel (@MexicoTravelCh) October 22, 2020

El Pozo del Gavilán, una maravilla natural en riesgo

Ubicado al sur del estado de Nuevo León, en el municipio de Galeana, a 300 kilómetros de la ciudad de Monterrey.

El Pozo el Gavilán se encuentra un terreno de tonalidades caoba con cactáceas y matorrales a su alrededor.

Este cenote en tierras deserticas, tiene una abertura de 67 metros de diámetro y 82 metro de profundidad.

Desde arriba se puede observar el color azul turquesa de su estanque, con más de 30 metros de hondo.

Es considerada una de las maravillas geológicas de Nuevo León.