Fulgencio, más allá de la roja
Sí, como todos lo saben y lo han hablado, el error de Robert Dante Siboldi fue meter a un jugador como Raymundo Fulgencio en una final que parecía en orden.
Como dicen “pecó por inocente” y confío en el muchacho que por momento dio destellos futbolísticos de grandeza. Lamentable, en cuanto a lo psicológico y mental, jamás estuvo preparado para Tigres.
El desenlace lo conocemos todos, a Julián Quiñones le bastó un par de jugadas para hacerlo enojar y que entregara la final. Si bien antes pudo haber falta del naturalizado, y Julián actuó de maravilla tras el golpe, la agresión ahí está. En ese momento Tigres perdió la final.
Más allá de la roja, Raymundo Fulgencio no es alguien que esté preparado para un equipo de la exigencia de Tigres, ni futbolística, ni mentalmente.
Sin el afán de meterme a sus problemas personales, su irresponsabilidad como persona e indisciplina en distintas ocasiones fuera de cancha, dicen muchísimo de él. Además, su irregularidad dentro del campo no está ni para la banca de los auriazules.
Conociendo esto de antemano, Siboldi debió estar consciente de que él no podía estar en una final en la que lo único que les quedaba era aguantar a los tiempos extra, un error del adversario o los penales. Lástima, para todos los Tigres, que confío en Fulgencio.
Además, realizó cambios como el de Quiñones que entró sin ritmo por no tener ni un minuto en liguilla o el de no arrancar con Juan Pablo Vigón que venía haciendo una increíble serie final. Probablemente errores que no le quedó de otra más que cometer.
Como bien lo mencioné, Raymundo Fulgencio no está para un equipo como Tigres y la institución ya le busca acomodo en el Grupo Orlegi (Atlas o Santos). Algo tarde, pero buena decisión.
Ojalá mejore el chavo…
La confianza de Tigres
Perder una final siempre duele, más contra una gran rivalidad de época y más en la forma en que la dejó ir Tigres. Pero el proyecto de los felinos se perfila para seguir mejorando.
Aún faltaba un día para la final y la directiva auriazul amarró a Juan Bruneta, el mejor futbolista del torneo pasado en México respecto a sus estadísticas.
En cuanto terminó la final, se dieron la tarea de buscarle acomodo a Vladimir Loroña, Raymundo Fulgencio y probablemente a Luis Quiñones. Seguro ya analizan los refuerzos para estos huecos y algunos otros.
Si bien la final dolió, parece que los felinos y su afición están conscientes de que sin despeinarse estarán presentes, mínimo, en las semifinales del siguiente certamen.
Con un líder como Siboldi y la columna vertebral con la que cuentan, y los refuerzos prometedores que han traído, todo parece indicar que va viento en popa.
Este Tigres de Siboldi, sin temor a equivocarme, es muy parecido al del 2015-2017, que llegó a 4 finales y ganó 3 títulos de las 6 posibles. Era un hecho verlos ahí y ahora todo parece indicar lo mismo.
Quiénes podrían levantar para el siguiente torneo y dar pelea sería el Cruz Azul y Monterrey, mientras que no se les vea un proyecto definido, el único rival sigue siendo el América…
Reconocimiento al América
Si bien muchos comentan que la final la ganaron con dudas, ya dije lo que opino. Pero el América es y fue el mejor equipo de la Liga Mx.
André Jardine fue traído de la Selección de Brasil por el San Luis, hizo un gran trabajo y llegó al Ame. Tan bueno es su fútbol que su auxiliar se quedó en el Atlético de San Luis y logró las semifinales.
André Jardine es de los pocos entrenadores jóvenes que logran analizar un equipo rival de pies a cabeza partido a partido. Además, cuenta con un equipo basto y atractivo para hacer lo que le plazca, como quedar campeón.
Independientemente de todo, el América fue el líder del torneo de forma contundente con 40 puntos. Sólo perdió en la Jornada 1 y de ahí no volvió a caer jamás.
Anotó 50 goles para ser la mejor ofensiva y ganó cada uno de sus clásicos contra los demás “grandes”. Además, se posicionó como la mejor defensiva del torneo.
Toda la liguilla fue superior a sus rivales y cuando Tigres los tenía contenidos, aprovecharon un sólo error de los felinos para terminar de matarlos en su propia cancha.
Si no les llega la “campeonitis”, que es muy famosa en México, y mantiene su base, seguirá siendo el rival a vencer junto a Tigres para el Clausura 2024.
Me gustó mucho el proyecto de Jardine. Honor a quien honor merece.